Una economía de servicios
Reinaldo Quintero
Presidente la Cámara Petrolera de Venezuela
Como sociedad, seguimos frente al desafío de implementar en forma racional y efectiva un Plan de Recuperación de nuestra industria principal, con los recursos y circunstancias que definen nuestra dura realidad. Ante esta responsabilidad, los actores políticos, económicos y sociales, nos hemos aproximado en la búsqueda de una salida donde, en forma ética y a través de valores humanitarios y transparencia, podamos resolver las circunstancias extremadamente difíciles que hoy afectan a nuestra población.
Para este fin, la Cámara Petrolera de Venezuela, como representante del empresariado petrolero por más de 40 años y como la organización que agrupa y está presente a lo largo de toda la cadena de valor de los hidrocarburos, actualizó su propuesta y la ajustó a la realidad actual, incluyendo aspectos estratégicos en materia financiera, operativa, jurídica y también en seguridad física.
En aguas arriba la prioridad es incrementar la producción un millón de barriles diarios, en un periodo de 2 años. En cuanto a corrientes medias y refinación, el objetivo es acompañar la meta de 200.000 barriles diarios de refinación de combustibles, primordialmente en el CRP Cardón, El Palito y Puerto La Cruz, para atender las necesidades del mercado interno. Asimismo, se proponen diversos esquemas alternativos para complementar los mecanismos de distribución del servicio de combustible, gas y aceite.
En lo que respecta al gas, se propone avanzar con las licencias otorgadas, como la del Proyecto Cardón IV; también, detener la quema del Gas de Venteo al Norte de Monagas; y en lo posible, activar y continuar con los Proyectos de los Bloques 2 y 4, así como también, los del Mariscal Sucre, Mejillones, Patao y Dragón.
En cuanto a corrientes aguas abajo e industrialización, es necesario acompañar los proyectos de mantenimiento y recuperación en los tres complejos petroquímicos existentes en Occidente: Ana Maria Campos, Olefina 1 y Olefina 2. Estas plantas impactan la cadena de valor del plástico.
También, debemos incorporarnos en la planta de fertilizantes de Moron, y en el Complejo Petroquímico de Jose en Oriente, donde se dispone de instalaciones para fertilizantes y aditivos. Además, es necesario apoyar en los proyectos de explotación de las minas de fosfato en Nabay del estado Táchira y Reyecito en Morón.
Para los fines anteriores, las empresas de la Cámara Petrolera se deben incorporar en las operaciones y mantenimiento de estos proyectos. Por lo que se han formulado propuestas y mecanismos de financiamiento acompañadas por la inversión privada, y focalizadas en las unidades de producción y refinación, bajo la figura de nuevos modelos de gestión de negocios, de acuerdo a las prioridades que nos plantea el sector público. Esto, con el fin de darle viabilidad a la cartera de proyectos, la recuperación de recursos disponibles y la continuidad de una economía de servicio estructurada sobre modelos de negocios auto regenerativos y sustentables. Es decir, desplazar el rentismo petrolero y convertirnos en una economía de servicios capaz de crear puestos de trabajo con progreso, tecnología y conocimientos para todo el tejido social y otras actividades económicas.
junta.directiva@camarapetrolera.org
@CamaraPetrolera